La Asociación para una Ciudadanía Participativa, ACI PARTICIPA, a la Comunidad Nacional e Internacional y, de manera particular, a las autoridades hondureñas ALERTA de manera URGENTE, sobre la grave situación de riesgo que pasan en estos días miembros de un grupo de campesinos y campesinas lencas del Departamento de La Paz, amenazados de muerte por un terrateniente que pretende desalojarlos de las tierras que cultivan.
Se trata de la Base Campesina NUEVA ESPERANZA integrada por unas 32 familias campesinas indígenas lencas, que desde junio de 2019 cultivan tierras declaradas, según sus miembros, como ejidales por el Instituto Nacional Agrario, INA. Los terrenos en posesión de la Base Campesina se ubica en el sitio denominado El Cacho entre los municipios de Santiago Puringla y Santa María del Departamento de La Paz.
Desde el pasado 25 de junio de manera permanente los campesinos y campesinas de la Base “NUEVA ESPERANZA” han estado siendo hostigados y amenazados de muerte por el señor Antonio Mazariegos, supuesto dueño de parte del terreno, y por hombres armados bajo su mando, quienes entran a sus tierras cultivadas de maíz y frijoles, amezándoles con convertirlas en un panteón donde los enterrarán a ellos y sus familias. El lunes 6 de julio, en medio de la crisis alimentaria, profundizada por la actual emergencia mundial, el señor Antonio Mazariegos metió su ganado para que pastara en los cultivos de maíz y frijoles que con tanto sacrificio los campesinos lencas han plantado, mientras hombres al servicio del señor Mazariegos, armados con escopetas y con otras armas de fuego amenazaban a los campesinos impotentes ante la acción criminal, mientras disparaban sus armas.
Desde ese grave incidente, la situación se ha tornado más peligrosa pues el acoso y hostigamiento se ha intensificado, manteniendo en permanente zozobra y constante vigilia a las familias campesinas de La Base Campesina “NUEVA ESPERANZA”.
En una denuncia pública refrendada por el Movimiento Indígena Lenca de La Paz, MILPAH, la Unión de Trabajadores del Campo, UTC, la Central Nacional de Trabajadores del Campo, CNTC y Comités Locales de Acompañamiento de Derechos Humanos, CLADH, ante el gobierno de Honduras y pueblo en general, responsabilizan de estas acciones y cualquier atentado contra la vida e integridad personal de los miembros de la Base Campesina “Nueva Esperanza”, al señor ANTONIO MAZARIEGOS y su familia.
ACI PARTICIPA hace un urgente llamado a las autoridades hondureñas a brindar protección a estos campesinos y campesinas lencas que se encuentran en riesgo de muerte, a fin de evitar una tragedia y garantizarles el goce y ejercicio de sus derechos. Al CONADEH, a la OACNUDH y demás organizaciones nacionales e internacionales de Derechos Humanos, pide mantenerse en alerta sobre los acontecimientos entorno al problema y a brindar su apoyo inmediato en el ámbito de sus mandatos y facultades.
Tegucigalpa, MDC, 17 de julio de 2020
Asociación para una Ciudadanía Participativa, ACI PARTICIPA.